Este proyecto es considerado uno de los más grandes y emblemáticos de la República Argentina. Junto con otras obras, permitió posicionar al Chaco como una de las provincias con mejor cobertura de abastecimiento de agua potable del país.
Se inició con una tubería troncal de GRP/ PRFV de diámetro 1200 mm de 177 km de longitud, que une la planta potabilizadora de Barranqueras con la localidad de Roque Saénz Peña. A partir de allí, se instalaron tres ramales de diferentes diámetros que hoy, abastecen de agua potable a 26 localidades aledañas.